Rendimiento deportivo y prevención de lesiones

Atletas como Usain Bolt, el golfista Tiger Woods, el tenista Andy Murray y el piloto Sebastian Vettel son algunos de los deportistas que recurren a la quiropráctica para mejorar su rendimiento y afrontar lesiones.


Estudios recientes demuestran que los ajustes quiroprácticos mejoran la propiocepción, lo que significa que hay una mayor precisión de movimiento y de control de brazos y pies.

La propiocepción es la habilidad del cerebro de saber la posición de las partes del cuerpo con los ojos cerrados. Tiene un papel clave en nuestra postura y en cómo nos movemos. Cuánto mejor postura y mejor movimiento, menor desgaste de las articulaciones y mayor rendimiento.

¿Qué es lo que hace la Quiropráctica para obtener estos resultados?

Mejora la comunicación entre cerebro y cuerpo y esto significa que hay un mayor control muscular y menor riesgo de lesiones.

Los estudios muestran que una sola sesión de Quiropráctica aumenta la activación y la contracción muscular tanto como si la persona llevase semanas entrenando su fuerza.

¿Qué es una subluxación vertebral o quiropráctica?

Es un segmento de la columna que no se mueve bien y que altera la información que pasa a través de la columna.  Esto puede resultar en un fallo de control de un buen movimiento que afecte al rendimiento y que a la larga cause dolor y otras disfunciones.

El quiropráctico está especializado en localizar y ajustar los segmentos disfuncionales (subluxaciones) para mejorar la comunicación entre cerebro y cuerpo.

Si quieres conocer cómo la quiropráctica puede mejorar tu rendimiento acude a un quiropráctico.

Cualquier persona deportista a no, se puede beneficiar del cuidado quiropráctico.

Referencias:

1. Haavik & Murphy. J Electromyogr Kinesiol. Apr 5 2012;22(5):768-776. 2. Haavik & Murphy. Journal of Manipulative & Physiological  erapeutics. 2011;34:88-97. 3. Holt et al. JMPT. Apr 2 2016. 4. Malliou et al. Journal of Back and Musculoskeletal Rehabilitation 17: 101–104 101 5. Marshall & Murphy. JMPT. 2006;29:196-202. 6. Niazi et al. Exp Brain Res. 2015;233:1165-1173.

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