La salud es algo que se construye o destruye cada día de nuestra vida. Aquí os detallo los puntos más importantes para vivir mejor. ¿Por qué al fin y al cabo, hemos venido para ser lo más felices posible no? Nuestro cuerpo es nuestro vehículo para ello 😉
1. Salud emocional:
Cuidar de nuestros pensamientos, con ellos construimos nuestra realidad. El cerebro tiene la capacidad del moldearse, como si fuera un músculo, lo podemos desarrollar para pensar en positivo. Lo cual tiene muchos beneficios para nuestra salud.
Trucos:
Dedica todos los días unos minutos en dar las gracias a diferentes cosas por ejemplo tu familia, tu casa, tu salud, una conversación, un paseo, haber descansado bien… es infinito, cuanto más lo practiques más cosas buenas verás 😉
Evita las películas violentas, tristes… y limita la exposición a noticias negativas (mantente informad@ pero sin dejarte arrastrar por la negatividad de algunas noticias).
2. Salud Social:
Uno de los estudios más largos de la historia se centra en averiguar qué tiene en común las personas que viven más… No es ni el ejercicio, ni la alimentación… es la vida social que tienen.
Trucos:
Llama a aquellas buenas amistades que llevas años sin contactar con la excusa una felicitación de cumpleaños, de navidad…
Abraza, permítete dar y recibir cariño con un inocente abrazo 🙂
Intercambia conversaciones y sonrisas con gente que quiza no conoces tanto pero que están cerca de tí por ejemplo en el supermercado, en el ascensor, en la cola de la panadería…
3. Salud física:
Mantenernos físicamente activos nos ayuda a ver las cosas con más optimismo (es un potente antidepresivo natural), nos da más energía (sí, cuanto menos hacemos, menos energía tenemos), ayuda a reforzar nuestro sistema inmunitario y a equilibrar nuestro sistema hormonal. ESTAMOS HECHOS PARA MOVERNOS!!
Truco:
Caminar cada día lo posible según nuestra condición física es estupendo para nuestro cuerpo y mente. Otro maravilloso ejercicio es bailar.
4. Descanso:
Cuando dormimos nuestro cerebro se desintoxica y todo nuestro cuerpo se repara. ¿Cómo esperamos rendir al día siguiente si no nos permitimos cargar nuestras pilas durmiendo?
Trucos:
Reduce los estimulantes, por ejemplo el café o té. Aprovecha los días de descanso para que sea tu cuerpo el que te diga cuando necesitas dormir, y no tú forzando con cafés.
Duerme durante la noche (dormir de noche es mucho más reparador que de día).
Lee o haz alguna actividad relajante antes de dormir (¿hace falta decir que el móvil nos despeja impidiendo conciliar el sueño pronto?)
5. Alimentación:
Al igual que una planta, nuestro cuerpo necesita vitaminas, minerales y otros nutrientes para que se pueda mantener sano.
Trucos:
Cuanto menos azúcar mejor.
Comer todos los días verduras y al menos una fruta cítrica (naranja, limón, mandarina, pomelo…).
Compra diferentes frutos secos ( Sin sal y sin tostar) y mezclalos en un gran bote y utiliza puñaditos como tentempié cuando tengas hambre durante el día o para acompañar otro alimento (una fruta, un yogur, una ensalada…) son maravillosos para tu cerebro. El pan, la pasta y otros cereales siempre integrales (es donde están la mayoria de nutrientes) y comerlos sin excedernos con la cantidad (al fin y al cabo son azúcares) .
6. Optimiza tu sistema nervioso :
El sistema nervioso regula las funciones del cuerpo ( tus órganos, tu fuerza muscular, tu agilidad, tu recuperación de lesiones…) Y pasa por tu columna, por eso es tan importante cuidar la espalda. Recuerda que pasar muchas horas sentados, posturas repetitivas, el estrés… afectan a su rendimiento.
Trucos:
Mantén a raya el estrés siempre que sea posible.
Realiza chequeos periódicos con tu quiropráctico para ayudar a que este sistema esté funcionando a pleno rendimiento.
No esperes a sentirte mal para cuidarte, se trata de disfrutar de la mejor función posible 😉